Esta medida incrementará las muertes por tabaquismo en México al no existir un control del tabaco real.

Por Alicia Yolanda Reyes.

Las leyes y reglamentos que prohíben fumar en espacios públicos como restaurantes, bares, cafeterías y otros centros de convivencia han demostrado su eficacia para disminuir la morbimortalidad.
En México de acuerdo con datos de la Secretaría de Salud y del Instituto Nacional de Salud Pública fallecen cada día 173 personas por enfermedades relacionadas con el consumo del tabaco. Es decir 63 mil personas al año.

La mayoría de ellas pasan, por lo menos los 10 últimos años de su vida, con constantes entradas y salidas al hospital, por problemas graves de salud, que incluyen infartos, neumonías y otros.
Lo cual implica sufrimiento, innecesario para el paciente y su familia, así como altos costos para el sector publico y privado y familiar.

En Jalisco por poner un ejemplo al sector salud le cuestan estos pacientes 186 millones de pesos por su atención.

En la ciudad de México en 2008, la aplicación de la Ley de Espacios Libres de Humo de Tabaco en 2008, dieron como resultado la disminución 10.6 % de muertes por Infarto agudo al miocardio y 19.8% egresos hospitalarios por la misma causa.

En Nueva York el tabaquismo era responsable de una de cada 10 muertes prevenibles para el 2002, cuando se iniciaron las campañas para dejar de fumar se detectó que la prevalencia de fumadores había disminuido en un 27 por ciento. De cada diez jóvenes que se pronosticaba iniciarían en el consumo seis no lo hicieron.

Los restauranteros saben que prohibir fumar en sus establecimientos no representa una pérdida económica, se evitan constantes enfermedades de su personal, disminuye el costo de mantenimiento de sus espacios, se deja de dañar paredes, cortinas, alfombras, y todo el mobiliario.

Tal vez al inicio disminuya la afluencia de clientes. Hay que recordar que en México solo el 12.8 por ciento es fumadora. El otro 87 % no consume ningún producto derivado del tabaco.
En esos términos más del cincuenta por ciento de las y los mexicanos tiene derecho a respirar aire libre de humo de tabaco.

Así como algunas personas fumadoras reclaman un” supuesto derecho ha fumar”. El resto de la población tenemos todo el derecho a proteger nuestra salud y la de nuestras familias

El humo de tabaco afecta no solo al que lo consume. Existe el humo de segunda y tercera mano que enferma al resto de la población que convive con las y los fumadores.

El Decreto Presidencial que entró en vigor el 15 de enero de 2023, tenía como principal objetivo proteger a toda la población, no solo a la no fumadora.

El decreto al prohibir la prestación de servicios en áreas la prestación de servicios o consumo de alimentos y bebidas tenía como principal objetivo proteger al personal de estos establecimientos, evitando que estén expuestos al humo de segunda mano.

Sin embargo para algunos empresarios que dirigen la CANIRAC, es más importante obtener ingresos económicos a costa de la muerte de miles de personas.

El tabaquismo tarde o temprano cobra la vida de más del cincuenta por ciento de quienes lo consumen.
Las muertes por tabaquismo causan mucho dolor en pacientes, familiares, amistades y todos aquellos que están cercanos.
Las familias de los restauranteros también están en riesgo. Es criminal que, por ganar más dinero, dejen de lado la salud de propios y extraños.

El juez que otorgó ese amparo tampoco le importó el bien común, y favoreció a los empresarios por sobre la salud de millones de mexicanos (aliciayolandar@hotmail.com)

Antecedentes: El 70% de la poblacion mundial esta protegido contra el humo del tabaco oms donde preveemos las acciones de la CANIREC