Dr. Leonel Arguello Yrigoyen, médico epidemiólogo

El dolor de estómago es una molestia común que puede variar desde una leve incomodidad hasta un dolor agudo e intenso y conocer las alertas es importante para salvar vidas, recuerde siempre buscar ayuda médica. Los malestares son dolor en el abdomen o panza, náuseas y vómitos, hinchazón, pérdida de apetito, acidez estomacal, diarrea o estreñimiento. El dolor de estómago puede ser una señal de que algo no está bien en el cuerpo, por lo tanto, escúchelo y tome las medidas que puedan ayudar a aliviar sus molestias y prevenir complicaciones.

Este dolor puede causarlo el comer en exceso, consumir alimentos grasos o picantes y comer demasiado rápido, produciendo indigestión, busque como comer menos o en porciones más pequeñas y frecuentes, también evite alimentos que le desencadenen los síntomas.

Otras causas pueden ser: la inflamación del revestimiento del estómago o gastritis, las llagas o úlceras abiertas en el revestimiento del estómago o el intestino delgado que después del diagnóstico, deberá tratarse con antiácidos, antibióticos y medicamentos específicos dirigido por un médico. El Síndrome del Intestino Irritable que afecta al intestino grueso de forma prolongada o crónica que le produce diarreas o estreñimientos. Las infecciones Virales o bacterianas, conocidas como gastroenteritis y la intolerancia a la lactosa o al gluten. El té de jengibre, menta y manzanilla pueden ayudar a aliviar el malestar. Recuerde beber suficiente agua para evitar la deshidratación, especialmente si hay vómitos o diarrea.

Las alertas médicas por dolor de estómago son un dolor abdominal severo y repentino, que puede ser un signo de una condición grave como apendicitis, perforación de úlcera o aneurisma aórtico o sea la arteria más grande e importante del cuerpo, la Aorta, puede llegar a romperse y matarte rápidamente.

Si el dolor dura más varios días sin mejoría; si existe sangre en el vómito o en las heces que puede indicar una hemorragia interna, úlceras o cáncer gastrointestinal. Pérdida de peso inexplicada que puede ser un signo de cáncer o enfermedades crónicas. Una fiebre alta acompañada de dolor abdominal puede ser indicativa de una infección grave como la peritonitis o infección de la bolsa que recubre el aparato intestinal.

Si el dolor abdominal está acompañado de dificultad para respirar, puede ser un signo de problemas cardíacos, inclusive un infarto en el corazón o afecciones en el pulmón. Vómitos que no paran pueden llevar a la deshidratación y pueden ser un signo de obstrucción intestinal o infecciones graves. Una hinchazón severa y repentina puede ser un signo de obstrucción intestinal o acumulación de líquidos. Todo lo anterior son urgencias médicas que deben ser atendidas a la brevedad posible. Aunque estos síntomas pueden ser alarmantes, mantener la calma y actuar rápidamente puede ayudar a manejar la situación de manera efectiva.

Recuerda que es mejor prevenir que lamentar. Si tienes dudas sobre tu salud, siempre es recomendable consultar a un profesional médico.

Solo te recuerdo que aumentar tu conocimiento en salud es estar preparado para ayudarse uno mismo y ayudar a los demás. Con solo orientar que lo que tiene la persona es peligroso y debe buscar ayuda médica es suficiente, nunca menospreciemos los malestares, ya que nuestra respuesta casi siempre es, ahí se te quitará más tarde y muchas veces esta es una pésima recomendación.