Dr. Leonel Arguello Yrigoyen, Médico especialista en Epidemiología.

Una intervención quirúrgica es un procedimiento médico en el que se realiza una incisión o herida en el cuerpo, con el propósito de diagnosticar, tratar o corregir una condición médica, un trauma o golpes. Se puede clasificar según los órganos a intervenir, la forma en que se realizará la intervención, cómo serán las heridas operatorias, la urgencia o planificación de la intervención, la finalidad, la zona del cuerpo, la penetración al organismo, la gravedad de extensión o importancia. Como ejemplos están la cirugía general, ortopédica o traumatológica, torácica, maxilofacial, plástica, otorrinolaringológica, oftalmológica, oncológica o para cáncer y la neurocirugía.

Actualmente lo más moderno es que el cirujano se asista con un robot quirúrgico, que va dirigiendo con un dispositivo controlado por computadora, a unos metros del paciente dentro de la sala de operaciones, que se programan para ayudar en el posicionamiento y manipulación de instrumentos quirúrgicos, pudiendo realizar procedimientos más complejos con mayor precisión, flexibilidad y control, en comparación con las técnicas convencionales. Se hacen cuatro incisiones o heridas pequeñas en el abdomen, una de ellas lleva una cámara tridimensional (3D), que te abarca todo, es como que estés dentro del cuerpo y te aumenta en 10 veces el tamaño real de la zona de intervención y en los otros tres orificios van las diferentes pinzas, bisturí, coaguladora, succionador y otros instrumentos médicos. Es como la Laparoscopía, pero en vez de tener dos dimensiones tienes tres dimensiones y haces zoom o acercamiento, y trabajas con una precisión milimétrica que solo la tiene la cirugía robótica, la cual existe desde 1985, estando presente ya en varios países del mundo, de hecho, en el América Latina, más de 130 instituciones públicas y privadas lo usan.

Posee la ventaja de ser mínimamente invasiva, incisiones más pequeñas y estéticas, ofrece imágenes de alta calidad, disminuyendo los errores del cirujano, menos sangrado, menor dolor posoperatorio, estancia hospitalaria más corta y tiempo de recuperación más rápido. Las complicaciones pueden ser infecciones y problemas posteriores según tipo de cirugía, por ejemplo, en la cirugía urológica para quitar la próstata podes tener infección urinaria, quedarte orinando por varios meses y puede haber impotencia. Ahora bien, como toda cirugía, el procedimiento se decide valorando los pros y los contras, en dependencia de la enfermedad y su etapa de evolución.+

Los problemas son el alto costo, los requisitos de capacitación para médicos y enfermeras, y errores que había antes, como temblor de la mano, balance, calibración, pérdida de material dentro del cuerpo y otros se han reducido o eliminado con las versiones de equipos más nuevos. El cirujano además está sentado, por lo que se cansa menos.

Se usa actualmente para neurocirugía, urología, ginecología, oncología, gastroenterología, cirugía cardíaca, plástica y torácica.

La cirugía asistida por robot es cara, cuestan como 3 millones de dólares y ​​cada instrumento conectado al brazo robótico cuesta entre $2,200 y $3500 dólares, más el mantenimiento y cambio de piezas después de un determinado número de veces usada. Aunque estas cifras nos alejan de nuestra realidad, tarde o temprano llegarán a nuestro país, como ha ocurrido con otros avances de la ciencia médica, por lo que es importante que usted la conozca.